Con el pretexto de la crisis financiera, el presidente Felipe Calderón anunció su plan de austeridad. En él incluyó la desaparición de tres secretarías de estado, entre ellas la Secretaría de Turismo. El presidente del empleo no dimensionó la pérdida de casi 10 mil empleos y de paso se olvidó de tajo de los muchos compromisos contraídos, entre ellos, el relanzamiento de Huatulco. El anuncio hecho ya casi un año atrás sobre el denominado también renacimiento de un gran destino, queda en la incertidumbre cada vez más evidente. Los más de 20 años de Huatulco lo dicen todo, no ha repuntado como se había planteado, lo mismo sucede con Loreto en Baja California Sur. Por su parte, Cancún, Ixtapa y Los Cabos han sobresalido. No es de extrañarse, el Norte, el Centro y el Sur, tienen sus respectivas prioridades. Para muestra, pese a la crisis, la construcción de la refinería Bicentenario esta aprobado para el Estado de Hidalgo. Ni siquiera importó la desaparición de la Secretaría de la Reform
Consultor en Turismo Sostenible y Desarrollo Local. Premio Nacional de la Juventud Indígena en Medio Ambiente 2008. Trabajando con la gente para un futuro sustentable con justicia, generando mejores políticas públicas.