El proceso electoral para elegir diputados federales el 5 de Julio de 2009, es la antesala del escenario teatro-electoral de 2010.
En este proceso de 2009, los partidos de oposición –incluido el PRI- han preferido buscar de manera separada un escaño en la cámara de diputados federal. Aunque no podemos generalizar, nuevamente el PRI ha elegido reciclar nombres y personajes de su interna vida política.
Por su parte, la otra oposición que comprenden la antigua coalición PRD, PT y Convergencia, han optado por romper temporalmente su alianza y, sólo los dos últimos han refrendado su sociedad ahora denominada “salvemos México”.
La ruptura -si se le puede llamar así- seguramente se relaciona con el golpeteo prolongado y tan desgastado que ocurrió al interior del PRD en su intento democrático para elegir su dirigencia nacional. El proceso electoral al interior del PRD, en el cual la corriente del líder moral de la coalición, es decir Andrés Manuel López Obrador no salió favorecida, seguramente fue determinante para que AMLO buscara refugio en la nueva coalición.
Es cierto, en la elección de la dirigencia nacional del PRD, en efecto, hubo prácticas antidemocráticas “mapacheo”, pero se suscitaron en las dos principales corrientes porque genéticamente ambas son priístas y éstas prácticas no les son ajenas. Sin embargo, ante el apoyo de AMLO a candidatos de la coalición Salvemos México surgen varias consideraciones y varios cuestionamientos.
1. ¿Es una muestra de que AMLO no es verdaderamente de espíritu democrático? lo anterior porque debe entenderse que en las democracias, se pierde o se gana, y se triunfa o se pierde con una mayoría de votos.
2. ¿Es una muestra también de que si no se está con AMLO, es estar contra él?
3. ¿Debe interpretarse el evidente apoyo de AMLO a los candidatos del PT-Convergencia, como el anuncio a destiempo de la conformación de un nuevo partido político?
4. ¿Representan estas acciones una manera modesta de poner en duda la democracia que practica el PRD, el cual fue y será siempre su bastión en la naciente democracia de nuestro país?
5. ¿En verdad se busca una verdadera oposición o –como el mismo lo dijo- sólo busca que el PT y Convergencia mantengan su registro porque el gobierno los quiere desaparecer?
6. ¿Está construyendo AMLO un refugio de sus ideas para mantenerse (sólo él) en lo que él llama lucha pacífica, aún cuando existen más y muchos más líderes morales en la izquierda?
7. ¿Cuál es la unidad que están construyendo los partidos de oposición?
8. ¿Existe en AMLO, en la izquierda y en la coalición Salvemos México una verdadera esperanza, pese a que el voto dividido sólo garantiza el triunfo de la derecha?
9. ¿Acaso es la esperanza del PRI por recuperar la mayoría en la cámara de diputados, la que el señor López construye?
10. ¿La inmensa mayoría de pobres quienes confiaron en AMLO en 2006 y los que a pesar de no ser partidarios de ningún partido político lo hicimos, debemos mantener ahora la esperanza en “Salvemos México”?
11. ¿De verdad quiere salvar a México señor López?
Para que la inmensa mayoría mantenga la esperanza en un gobierno justo, en una madurez en la democracia, en una aplicación de las leyes sin ninguna distinción, en una verdadera justicia, en una aplicación y distribución equitativa de los recursos públicos, se debe construir entre las diferencias, la unidad, más cuando se trata de las diferencias en la oposición. ¿No se supone que somos oposición?
Con la evidente subdivisión de la oposición –ni siquiera izquierda ni socialista- a los indígenas que hemos vivido engañados, discriminados, desconocidos, maquillados, excluidos del desarrollo, oprimidos, reprimidos ¿cuál es la esperanza que nos queda?
Con todos esos ejemplos de los partidos políticos de oposición, sobre todo de aquellos pequeños que no tienen la más mínima posibilidad de obtener un triunfo de manera separada, sólo se construye la desesperanza, la avaricia, el egoísmo. También se evacúa por el caño, los beneficios de la lucha de años, que han costado muertes ¿a quién le importa?
Ante los acuerdos de las cúpulas, las bases, la población civil debe construir su propia esperanza, basado en un partido –no hay de otra- de verdadera oposición, de lucha, que cuente con trayectoria y posibilidades de triunfo. De no hacerlo, sólo hay garantías a la derecha y un eterno descanso de la esperanza.
Mayo de 2009.
En este proceso de 2009, los partidos de oposición –incluido el PRI- han preferido buscar de manera separada un escaño en la cámara de diputados federal. Aunque no podemos generalizar, nuevamente el PRI ha elegido reciclar nombres y personajes de su interna vida política.
Por su parte, la otra oposición que comprenden la antigua coalición PRD, PT y Convergencia, han optado por romper temporalmente su alianza y, sólo los dos últimos han refrendado su sociedad ahora denominada “salvemos México”.
La ruptura -si se le puede llamar así- seguramente se relaciona con el golpeteo prolongado y tan desgastado que ocurrió al interior del PRD en su intento democrático para elegir su dirigencia nacional. El proceso electoral al interior del PRD, en el cual la corriente del líder moral de la coalición, es decir Andrés Manuel López Obrador no salió favorecida, seguramente fue determinante para que AMLO buscara refugio en la nueva coalición.
Es cierto, en la elección de la dirigencia nacional del PRD, en efecto, hubo prácticas antidemocráticas “mapacheo”, pero se suscitaron en las dos principales corrientes porque genéticamente ambas son priístas y éstas prácticas no les son ajenas. Sin embargo, ante el apoyo de AMLO a candidatos de la coalición Salvemos México surgen varias consideraciones y varios cuestionamientos.
1. ¿Es una muestra de que AMLO no es verdaderamente de espíritu democrático? lo anterior porque debe entenderse que en las democracias, se pierde o se gana, y se triunfa o se pierde con una mayoría de votos.
2. ¿Es una muestra también de que si no se está con AMLO, es estar contra él?
3. ¿Debe interpretarse el evidente apoyo de AMLO a los candidatos del PT-Convergencia, como el anuncio a destiempo de la conformación de un nuevo partido político?
4. ¿Representan estas acciones una manera modesta de poner en duda la democracia que practica el PRD, el cual fue y será siempre su bastión en la naciente democracia de nuestro país?
5. ¿En verdad se busca una verdadera oposición o –como el mismo lo dijo- sólo busca que el PT y Convergencia mantengan su registro porque el gobierno los quiere desaparecer?
6. ¿Está construyendo AMLO un refugio de sus ideas para mantenerse (sólo él) en lo que él llama lucha pacífica, aún cuando existen más y muchos más líderes morales en la izquierda?
7. ¿Cuál es la unidad que están construyendo los partidos de oposición?
8. ¿Existe en AMLO, en la izquierda y en la coalición Salvemos México una verdadera esperanza, pese a que el voto dividido sólo garantiza el triunfo de la derecha?
9. ¿Acaso es la esperanza del PRI por recuperar la mayoría en la cámara de diputados, la que el señor López construye?
10. ¿La inmensa mayoría de pobres quienes confiaron en AMLO en 2006 y los que a pesar de no ser partidarios de ningún partido político lo hicimos, debemos mantener ahora la esperanza en “Salvemos México”?
11. ¿De verdad quiere salvar a México señor López?
Para que la inmensa mayoría mantenga la esperanza en un gobierno justo, en una madurez en la democracia, en una aplicación de las leyes sin ninguna distinción, en una verdadera justicia, en una aplicación y distribución equitativa de los recursos públicos, se debe construir entre las diferencias, la unidad, más cuando se trata de las diferencias en la oposición. ¿No se supone que somos oposición?
Con la evidente subdivisión de la oposición –ni siquiera izquierda ni socialista- a los indígenas que hemos vivido engañados, discriminados, desconocidos, maquillados, excluidos del desarrollo, oprimidos, reprimidos ¿cuál es la esperanza que nos queda?
Con todos esos ejemplos de los partidos políticos de oposición, sobre todo de aquellos pequeños que no tienen la más mínima posibilidad de obtener un triunfo de manera separada, sólo se construye la desesperanza, la avaricia, el egoísmo. También se evacúa por el caño, los beneficios de la lucha de años, que han costado muertes ¿a quién le importa?
Ante los acuerdos de las cúpulas, las bases, la población civil debe construir su propia esperanza, basado en un partido –no hay de otra- de verdadera oposición, de lucha, que cuente con trayectoria y posibilidades de triunfo. De no hacerlo, sólo hay garantías a la derecha y un eterno descanso de la esperanza.
Mayo de 2009.
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