Cuando hablamos de apropiación comunitaria, evocamos un sin número de manifestaciones e iniciativas comunitarias donde la mayoría no sólo exige sus derechos, sino, plantea integrar sus propias consideraciones e inquietudes a los planes de desarrollo.
Las fallas estructurales en el modelo de desarrollo, donde desde hace mucho tiempo no está contemplada la consulta popular pero sobre todo acentuado en los últimos gobiernos de éste país, ha servido de base para el cuestionamiento ciudadano. Así, los gobiernos se han ganado a pulso el derecho de ser cuestionados por la sociedad civil organizada.
Sin embargo, pese a que ese cuestionamiento surgido desde la sociedad ha sido un mecanismo para reorientar las políticas públicas, no obstante, sólo en donde la cohesión social y la capacidad de propuesta esta fundada en la razón –muchas veces técnicas- se han logrado buenos resultados. En otros casos, la falta de tacto desde lo gubernamental, ha hecho retroceder planes gubernamentales, entre algunos ejemplos podemos mencionar; el intento de la construcción del nuevo aeropuerto en el Estado de México, la presa la Parota en Guerrero, etc.
En el peor de los casos, ni las razones técnicas han podido contra los planes de un gobierno federal que antepone sus intereses de grupo, entre los casos más sobresalientes están; la destrucción al patrimonio cultural como lo es Teotihuacan, Chichen Itzá, Tulúm y lo más cercano, la modificación del polígono del Parque Nacional Huatulco en Oaxaca, etc.
En este sentido, la iniciativa de realizar el foro de análisis convocado por organizaciones ambientalistas de la región y las autoridades comunales de la región chontal-costa el día 5 de Septiembre en el municipio de Santa María Tonameca, con motivo de cuestionar la construcción de la carretera de cuatro carriles que conectará el corredor turísticos Puerto Escondido-Huatulco, es un magnífico antecedente.
Según varios asistentes, las casi seiscientas personas de toda la región reunidas para cuestionar a servidores públicos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no sólo coincidieron en sus reclamos, sino, la coincidencia entre sus puntos de vista e inquietudes, lograron acordar un segundo foro para el primer sábado de Octubre, entre otros compromisos al interior de cada municipio y núcleos agrarios participantes.
En el ejemplo de éste foro, sobresale la organización que no es más que, la necesidad de pedir el derecho a ser respetado y evidenciar la obligación de la SCT en respetar y considerar a las comunidades. Sobre todo, se trata de un proceso de apropiación comunitaria que se sintetiza a un parámetro importante, la firma de un resolutivo entre las partes. Lo cual, parece ser más un mecanismo de negociación que de rechazo al proyecto. No obstante es, un ejemplo de apropiación comunitaria como efecto de éste foro.
Las fallas estructurales en el modelo de desarrollo, donde desde hace mucho tiempo no está contemplada la consulta popular pero sobre todo acentuado en los últimos gobiernos de éste país, ha servido de base para el cuestionamiento ciudadano. Así, los gobiernos se han ganado a pulso el derecho de ser cuestionados por la sociedad civil organizada.
Sin embargo, pese a que ese cuestionamiento surgido desde la sociedad ha sido un mecanismo para reorientar las políticas públicas, no obstante, sólo en donde la cohesión social y la capacidad de propuesta esta fundada en la razón –muchas veces técnicas- se han logrado buenos resultados. En otros casos, la falta de tacto desde lo gubernamental, ha hecho retroceder planes gubernamentales, entre algunos ejemplos podemos mencionar; el intento de la construcción del nuevo aeropuerto en el Estado de México, la presa la Parota en Guerrero, etc.
En el peor de los casos, ni las razones técnicas han podido contra los planes de un gobierno federal que antepone sus intereses de grupo, entre los casos más sobresalientes están; la destrucción al patrimonio cultural como lo es Teotihuacan, Chichen Itzá, Tulúm y lo más cercano, la modificación del polígono del Parque Nacional Huatulco en Oaxaca, etc.
En este sentido, la iniciativa de realizar el foro de análisis convocado por organizaciones ambientalistas de la región y las autoridades comunales de la región chontal-costa el día 5 de Septiembre en el municipio de Santa María Tonameca, con motivo de cuestionar la construcción de la carretera de cuatro carriles que conectará el corredor turísticos Puerto Escondido-Huatulco, es un magnífico antecedente.
Según varios asistentes, las casi seiscientas personas de toda la región reunidas para cuestionar a servidores públicos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no sólo coincidieron en sus reclamos, sino, la coincidencia entre sus puntos de vista e inquietudes, lograron acordar un segundo foro para el primer sábado de Octubre, entre otros compromisos al interior de cada municipio y núcleos agrarios participantes.
En el ejemplo de éste foro, sobresale la organización que no es más que, la necesidad de pedir el derecho a ser respetado y evidenciar la obligación de la SCT en respetar y considerar a las comunidades. Sobre todo, se trata de un proceso de apropiación comunitaria que se sintetiza a un parámetro importante, la firma de un resolutivo entre las partes. Lo cual, parece ser más un mecanismo de negociación que de rechazo al proyecto. No obstante es, un ejemplo de apropiación comunitaria como efecto de éste foro.
Saludos al compañero floriberto
ResponderEliminarMuy buen escrito, una triteza que una joya en prosa no sea apreciada por un pais que carece de lectores al menos su media poblacional, asi que dichosos los invitados a la cena del señor
y que estos espacios virtuales nos lleven de la reflexión a la accción civil organizada para una participación mas elevada en procesos y cambios sociales